5/26/2015

Capitulo 13


La noche había sido larga, pero a pesar de eso al día siguiente me toco madrugar e ir a trabajar aunque lo que me apetecía era quedarme metida en la cama y no salir durante meses.
Creo que levantarme fue lo más duro que había hecho en mi vida pero una vez en pie, me arregle, desayune y me fui a trabajar.
Si levantarme había sido duro, el día en la oficina había sido peor. Mi queridísima jefa quería que el reportaje estuviese para dentro de una semana que era cuando salía el nuevo ejemplar para la revista y que en unos tres días la noticia estuvieses lista para ponerla en la página web. Así que a las ocho horas de trabajo las pase delante del ordenador sin despegar los ojos de él casi ni para salir a comer. Lo único que me había sacado del aburrimiento y había dibujado una sonrisa en mis labios fue el mensaje que recibí en el móvil a la hora de la comida.
Estaba sentada delante del ordenador releyendo lo que había escrito mientras me comía una ensalada cesar. En ese momento mi móvil, sonó por primera vez en toda la mañana, y era raro normalmente mi jefa no me dejaba en paz pero parecía que la noticia de hoy corría prisa porque no me había molestado ni una sola vez en toda la mañana. Mire el móvil y me sorprendió que el mensaje no fuese de mi jefa sino de Joe.

“viendo que no te decides a decirme si me vas a dar una cita o no, te lo voy a pedir así. Hoy si no contestas a este mensaje iré sobre las nueve a buscarte a casa y te llevare a cenar, si contestas daré por sentado que no quieres cenar conmigo ni hoy ni nunca.”

Leí dos veces el mensaje sin terminar de creerme lo que ponía. Joe me estaba dando un ultimátum, se estaba cansando de estar detrás de mí. En un primer momento pensé en contestarle pero luego lo pensé mejor, necesitaba distracción y Joe era la persona adecuada para esa tarea, era capaz de hacerme sonreír hasta cuando estaba enfadada y muy cansada como ahora.
Después de un par de horas más de trabajo decidí salir antes ya que la semana pasada había echado horas de más y así me daría tiempo a descansar un poco antes de arreglarme para salir a cenar con Joe.

Cuando llegue a casa deje el maletín y la chaqueta en el primer lugar que vi y me tire encima de la cama para descansar un rato, pero el cansancio pudo conmigo y me quede dormida, despertándome justo una hora antes de que Joe pasase a por mí. Así que corriendo me duche y empecé a arreglarme.  

Me deje el pelo suelto y me lo rice un poco, me maquille ligeramente como solía hacer y después fui al armario para ver que me podía poner. Tener tanta ropa era malo, la mayoría de las veces no sabía que ponerme. Después de mirar varios vestidos y que ninguno me terminase de convencer vi el portatrajes colgado al fondo del armario casi tapado por el resto de la ropa.  Saque el traje que había dentro, me lo puse y lo convine con unas sandalias negras y una americana. Metí lo imprescindible en el bolso de mano que iba a juego con las sandalias y me senté en el salón a esperar. Cinco minutos después el telefonillo sonó y me levante a cogerlo. Era Joe así que sin más dilación cogí las llaves salí de casa y baje. Joe me esperaba apoyado en el coche. Llevaba traje y camisa negros y una preciosa corbata roja como el color de mi vestido. Me acerque a él y le di un beso en la mejilla.

-¿nos vamos?

-Claro-me abrió la puerta del copiloto y luego dando la vuelta por delante del coche entro en él



Decirle a Dante que dentro de una semana me iba de vacaciones me había llevado más tiempo del que había previsto en un principio, pero a pesar de que no quería darse por enterado y que no querida darme las vacaciones al final termino entendiendo que quisiese o no iba a pasar las navidades fuera de casa. En cuanto que salí del local me puse de camino al ensayo al que ya llegaba muy tarde y todo porque no había persona más pesada que Dante. Cuando llegue todos estaba practicando, unos en grupos, otros en solitario y a había alguna pareja como Sam y Matt que estaban practicando uno de mis bailes con Matt, y que Sam tenía que aprenderse porque era mi sustituta aunque había intentado quitar casi todos mis números.

-pensé que ya no vendrías-me dijo Matt sin soltar a Sam, la cual estaba en el aire
-Tu hermano es un pesado, le he tenido que obligar a que aceptase que me iba a ir de vacaciones-suspire-es más cabezón que tu
-Si puede-bajo a Sam y siguió bailando con ella-Nick está aquí
-vale, ahora salgo

Entre en el vestuario para cambiarme.
Pensé que Nick me dejaría respirar un poco pero parece que me equivocaba lo de ayer creo que solo lo ha animado a ser más persistente. Cuando salí del vestuario le vi al fondo, me saludo con la mano y yo hice lo mismo. Me di media vuelta y empecé a mandar a cada uno a su sitio correspondiente. En una hora ya había visto todos los números individuales y había corregido los posibles fallos y las dudas de mis compañeros. Después ensayamos los números grupales, primero conmigo y luego los que se podían sin mí. Sam y Matt se acoplaban muy bien el uno al otro así daba gusto trabajar aunque me preocupaba un poco que Dante no quisieses verlo y tuviese otra vez discusión con él, que ya sería lo que me faltaba esta semana.
Cuando terminamos todo el mundo se fue para descansar hasta esta noche. Yo me quede un rato más para compensar el tiempo que había perdido en el club discutiendo con Dante. Diez minutos más tarde ya se habían ido todos y tenía toda la sala para mi sola así que puse la música que solía utilizar para calentar y me puse a bailar. Después de un par de canción para la música y mire a Nick desde el espejo, que seguía sentado en el mismo sitio y en la misma postura. Me gire para enfrentarlo.

-¿Qué te pasa? Normalmente ya habrías venido a interrumpirme y tendía que estar apartándote para que me dejases practicar tranquila.
-quería enseñarte algo-se levanto
-¿y a que estas esperando?-puse los brazos en jarra
-a estar preparado-se acercó a la minicadena

Saco un Cd del bolsillo de la chaqueta que tiro en el suelo y abriendo la bandeja de Cd’s de la minicadena saco el que yo tenía puesto y puso el suyo. Le dio al play y al rato un melodía empezó a fluir de la minicadena y Nick empezó a cantar.

I don’t like the way he’s looking at you


I’m starting to think you want him too

Am I crazy, have I lost ya?

Even though I know you love me, can’t help it

I turn my chin music up
And I’m puffing my chest
I’m getting red in the face
You can call me obsessed
It’s not your fault that they hover
I mean no disrespect
It’s my right to be hellish
I still get jealous

'Cause you’re too sexy, beautiful
And everybody wants a taste
That’s why (that’s why)
I still get jealous

La música siguió sonando pero el había dejado de cantar y estaba a unos centímetro de mi.

-¿Qué te parece?
-No esta nada mal ¿Cuándo la has compuesto?
-hace unos dias-la minicadena dejo de sonas-aunque no esta terminada
-La cancion me la tengo que tomar como una indirecta-me gire y mire al espejo

Nuestras miradas de cruzaron en el espejo mientras yo esperaba una respuesta a mi pregunta. Viendo que no me decia nada, me dirigi hacia el vestuario.


-Me cambio y salgo-entre dentro a cambiarme


Había mandado el mensaje pensando que Emily lo contestaría solo por llevarme la contraria pero al parecer me equivocaba ya que no recibí respuesta alguna así que me prepare para ir a buscarla a la hora que le había dicho. A las nueve estaba en la puerta de su casa esperando a que saliese. Por suerte solo tardo cinco minutos en salir por la puerta.  Cuando la vi no puede evitar sonreír, se había puesto el vestido8 que le había regalado en el amigo invisible. Era un vestido rojo hasta la mitad de muslo y con escote en forma de V. Me había puesto corbata roja esperando que ella se pusiese ese vestido. Se acercó a mí, me dio un beso en la mejilla que me sorprendió bastante, le abrí la puerta del coche para que entrase y luego di la vuelta por delante para entrar yo. El restaurante estaba a unos diez minutos en coche de la casa de Emily. Cuando llegamos deje el coche en el aparcamiento, salí del coche y le abrí la puerta para que saliese. Cuando llegamos a la puerta del restaurante esta se abrió y ambos entramos.
El recibidor era algo pequeño en comparación con el resto del restaurante. Destres del atril  estaba una camarera  ataviada con el uniforme del restaurante.  Cuando nos vio dejo lo que estaba haciendo y nos llevó a la mesa que hacia unas horas había reservado. Esta se encontraba al lado de unos ventanales que daban a la calle y a una magnifica vista de la ciudad y aunque solían estar abiertos, hoy no lo estaba ya que el otoño ya estaba haciendo acto de presencia y estaba empezando a hacer frio.
Le retire la silla a Emily para que sentara y luego me senté en la otra silla que estaba enfrente de la suya. La camarera nos trajo las cartas y luego nos dejó solos.

-¿cómo es que no han mirado si estabas en las reservas?-me miro por encima de la carta
-suelo venir a menudo, me gusta mucho la comida que sirven aquí-y apostar por lo seguro le garantizaba que ese ámbito de la cita estuviese cubierto y no tuviese que preocuparse, pero eso no se lo iba a decir

Sus ojos volvieron a la carta y espere a que ella supiese que quería. La camarera volvió con el vino que nos sirvió a ambos y luego se volvió a ir. Emily cerró la carta y el poso encima de la mesa.

-si no quieres vino, puedo pedir cualquier otra cosa
-no hace falta el vino está bien
-¿ya sabes lo que quieres?
-si ya podemos pedir si tu también sabes lo que vas a pedir

Llame a la camarera y ambos pedimos nuestra comida. Emily pidió una ensalada de primero y pescado de segundo mientras que yo pedí un revuelto de setas de primero y carne de segundo. Después de comer pedí el postres especial que esperaba que a Emily le gustase.

-¿que se supone que es el postre que has pedido? El nombre no da ninguna pista
-ahora cuando lo traigan lo sabrás pero te puedo asegurar que te va a gustar, cuando vengo siempre lo pido

La camarera volvió con el postre "Cupido" que constaba de una mousse de chocolate blanco con unas frutas rojas encima. Cuando ambos postres estuvieron en la mesa, le hice un gesto para que lo probase. Emily lo probo y espere su reacción que fue cerrarlos ojos y asentir con la cabeza. Ambos nos comimos el postre sin entablar conversación alguna. Cuando terminamos le hice una señal al camarero para que me trajese la cuenta y así pagar.

-¿te ha gustado la cena?-le pregunte mientras el camarero venia y cogía la tarjeta de crédito para pagar
-sí, todo estaba buenísimo, pero lo que más el postre, creo que con él me has conquistado-sonrió de una forma muy dulce

Cuando el camarero me devolvió la tarjeta salimos del restaurante. Le coloque mi chaqueta sobre los hombros porque a esta hora ya hacia frio, la cogí de la mano y nos pusimos camino al coche que nos esperaba en el aparcamiento del restaurante. Cuando llegamos al aparcamiento había un grupo de personas que se notaba de sobra que no habían venido a cenar.

-son periodistas-dijo Emily reafirmando mis sospechas
-¿qué hacemos?-la mire
-no se-suspiro y luego puso una de sus manos en la barbilla mientras pensaba-¿crees que sabrán que es tu coche?
-a saber, a veces son demasiado listos, puede que me viesen salir de casa o que solo averiguasen donde estaba comiendo
-tengo una idea-se giró para mirarme-dame las llaves del coche y espérame en la tienda que hay enfrente de la puerta del restaurante-estiro la mano
-¿Que vas a hacer?
-tienes que confiar en mi-no me gustaba nada como sonaba eso-venga dámelas no pasara nada-suspire y le tendí las llaves, ella me dio la chaqueta y se puso de camino al coche.

Cogí la chaqueta y me fui al lugar donde habíamos quedado. Al cabo de unos cinco minutos vi como mi coche se acercaba a toda velocidad. Se paró en seco a mi lado y la puerta del copiloto se abrió.

-sube nene-me subí al coche y antes de que me diese tiempo a cerrar la puerta Emily arranco ya que algunos periodistas la seguían a pie

Mire por el retrovisor como uno de los periodistas se subía en un coche y empezaba a seguirnos. Por lo visto eso no asusto nada a Emily ya que acelero y empezó a meterse por callejuelas intentando darles esquinazo. Yo estaba intentando que no me diese un paro cardiaco por la velocidad que llevábamos, pero Emily estaba como pez en el agua. Diez minutos después nadie nos seguía y Emily había disminuido considerablemente la velocidad.

-¿quién te ha enseñado a conducir así?-le dije mirándola
-cuando termine la carrera de periodismo, mi padre me lo pago ya que había oído que podría necesitarlo para huir en caso de peligro o para perseguir a alguien, la verdad es que nunca pensé que me serviría algún día-me miro sonriendo un momento y luego volvió a mirar a la carretera-¿vamos a hacer algo más?
-no sé, si te apetece podemos ir a algún otro sitio, como a tomar una copa o a bailar, aunque ya es tarde y mañana trabajas ¿no?-miro el reloj del coche
-la verdad es que es tarde y aunque mañana trabajo desde casa espero levantarme pronto así que será mejor ir a casa
-pues pon rumbo a tu casa

Y eso hizo, en unos minutos estabas en frente de la puerta de su casa. Paro el coche y abrió la puerta. Mientras ella se ponía otra vez los zapatos para salir del coche salí del coche y me acerque a la puesta y le tendí la mano cuando puso los dos pies en el suelo. Emily cogió mi mano y la ayude a incorporarse. Cuando la tuve de pie delante de mí mano libre se posó en su cintura y la acerque.

-podrían estar vigilándonos y hacernos fotos, lo que nos llevaría a todas las portadas de todas las revistas
-si salgo con una chica tan guapa, creo que no me importaría así que creo que me voy a arriesgar a que me pillen-la acerque un poco más a mí e incline la cabeza para besarla
-que sepas que estás jugando con fuego-me dijo sonriendo
-lo sé y me encanta-luego la bese

Este fue mejor que el dela piscina ya que ahora si sabía que la quería besar y parecía que estaba encantada con ello, es más esta vez puso más empeño y ganas. Cuando el beso finalizo pegue mí frente a la suya.

-creo que debería irme-la vi sonreír-pero ahora mismo es lo último que quiero
-yo también, pero mañana trabajo así que te tienes que ir
-vale-la solté
-no hace falta que me acompañes hasta la puerta-se apartó para que entrase al coche que tenía la puerta abierta

-debería hacerlo, soy un caballero
-lo sé, es una de las cosas que me gustan de ti, pero no hace falta así que buenas noche-me dio un ligero beso en los labios y ahí me dejo en medio de la calle mientras que ella entraba en casa.



Más que una indirecta era una directa muy clara. Quería decirla que no se acercase a Dante porque cada vez que la veía con él, algo dentro de mí me instaba a ir y decirle que se alejara de ella, pero solo conseguiría que Claire se alejase de mí. Recogí el cd y me puse la cazadora. Últimamente había estado pensando en que cosas podría hacer con Claire para pasar más tiempo juntos pero no se me había ocurrido ninguna que a los dos nos gustase, también había que tener en cuenta que no la concia lo suficiente como para saber qué era lo que más le gustaba hacer y eso sin contar que era muy difícil ya que se cerraba en banda en cuanto quería acercarme. Mientras apagaba la minicadena salió del vestuario y se puso delante del espejo para colocarse bien la chaqueta y el pañuelo que siempre llevaba ya hiciese frio o calor. Me quede mirándola hasta que se dio la vuelta.

-¿nos vamos?-recogió el bolso del suelo
-si-me acerque a ella para salir juntos-¿me darías clases de baile?
-claro, pero para que quieres aprender
-siempre he querido pero no he encontrado un bueno profesor o profesora, y creo que tu serias fantástica-se quedó mirándome sorprendida
-no digas tonterías, solo quieres que te de clase para poder meterme mano-giro sobre sus talones y se puso de camino a la puerta
-eso es mentira de verdad quiero aprender-se giró y me miro con una sonrisa
-lo sé, pero te pones muy guapo cuando te sonrojas-creo que me puse más porque vi en su cara la sonrisa más sincera que tenía-vamos señor tomate, tengo prisa-extendió su mano para que la cogiese y eso hice

Los dos salimos de la academia y entramos en mi coche.

-¿a dónde quieres que te lleve?-la mire
-tengo que comprar una cosas en el centro comercial, así que serás muy amable si me acercas
-pues vayamos al centro comercial

Arranque el coche y fuimos al centro comercial donde sin decir nada, la acompañe a todas las tiendas a las que quiso ir y le lleve las bolsas. Cuando terminamos de comprar todo lo que necesitaba nos fuimos al Vips a tomar algo juntos. No hablamos hasta que el camarero nos tomo nota y luego se fue.

-¿para que son tantas cosas?-le dije mirando el monton de bolsas que descasaban en una de las sillas
-dentro de unos dias me voy de viaje y necesitaba algunas cosas-el camarero nos trajo las bebidas
-¿A dónde vas?-le dije mientras vertia mi cocacola en el vaso
-a ver a mis padres-la mire esperando a que me diese mas datos-voy a España
-¿eres española?
-si y estadounidense, tengo doble nacionalidad ademas mi padre era Americano-el camarero nos trajo la comida
-¿y hasta cuando vas a quedarte?
-tenia pensado estar hasta año nuevo alli, hace mucho que no voy ¿Por qué quieres saberlo?
-por que va a ser un fastidio no tener a nadie a quien molestas cuando estas intentando ensayar
-siempre puedes intentar molestar a Matt-dio un trago a su bebida-pero seguro que el se lo toma mucho peor que yo y puede que termines en el hospital-ambos reimos
-creo que tendre que aguantarme las ganas
-exacto, ademas tampoco es que sea mucho tiempo ya veras como se pasa rapido, es mas siempre puedes llamarme al móvil para molestarme
-es verdad no habia caido en eso

Cuando terminamos de comer, pague la cuenta y ambos nos fuimos hasta el coche que nos esperaba en el aparcamiento del centro comercial y la aceque a casa. Cuando llegamos a su casa se desabrocho el cinturon, me dio un beso en la mejilla y se bajo del coche.


-ya nos veremos-y se puso de camino a su casa

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